La pandemia del siglo veintiuno, deja al descubierto la deficiencia de los sistemas de salud de muchos países, incluyendo países de primer nivel, la humanidad todavía no tienen la capacidad suficiente para detener y controlar pandemias.

Los países desarrollados preocupados por mantener una supremacía económica y armamentista; los países en nivel de desarrollo humano con gobiernos corruptos preocupados por desfalcar las arcas del estado, han olvidado que sus sistemas de salud necesitan reforzarse y afianzarse para promover el derecho a la salud de la población en general.

Por lo que esta es la primera lección que tiene que reflexionarse, desconocemos si será la única pandemia o bien tendremos que lidiar con virus desconocidos en el transcurso de este siglo, lo que sí es cierto es que debemos de restaurar instituciones de acuerdo con los conocimientos adquiridos en esta crisis para afrontar los retos que tenemos por delante. Por lo tanto el desafío de los gobiernos y los pueblos de todo el mundo, será tomar medidas imperativas que permitan adelantarse a las diferentes crisis sanitarias, económicas y sociales que nos depara el futuro.